HISTORIA
En 1998, una pequeña gran mujer, con una mala salud de hierro, voluntaria de prisiones desde hacía muchos años, y por lo tanto conocedora de la dura realidad de las personas que se quedaban atrapadas en la droga y de sus familias, buscaba ayuda para estas personas.
Conoció Proyecto Hombre y descubrió que eran una familia que acogía y aceptaba a las personas que necesitaban ayuda.
Pero además que aplicaban una metodología con un gran índice de resultados.
…Y vio que era bueno, y decidió llevarlo a Almería.
Con su entusiasmo y poder de transmisión, consiguió contagiar a un gran número de personas en Almería y el sueño se fue convirtiendo en realidad.
Un logro común
Las personas por las que trabajamos, a la vez llenan nuestra vida de sentido.
Porque cuando das recibes mucho más de lo que has dado.
TRAYECTORIA
Nuestro camino desde entonces ha sido una montaña rusa, con subidas y bajadas: Dificultades económicas, equipos que se quiebran, sueños que se truncan, esperanzas que se diluyen… piedras en nuestro camino que nunca hicieron que desistiéramos…Aun así, continuamos el viaje, el sueño, el camino hacia la meta…porque siempre había personas que merecía la pena ayudar.
Y ese era el motor que hacía que siguiéramos adelante. En este camino las personas que han formado parte del equipo, ya fueran profesionales o voluntarios descubrieron que, al acompañar a otra persona en un proceso interior, te arrastra a tu propio proceso y desde ahí seguir creciendo.
FUTURO
Y esto supone entrar en crisis, resolverlas y superarlas o salir corriendo y huir de tu propia realidad. La parte del equipo que permanece desde los comienzos (voluntarios y profesionales), recuperan su energía y entusiasmo al dar un abrazo a quien lo necesita.
Otras personas van incorporándose y consolidándose, otros simplemente dejan su huella de haber dado lo mejor y continúan su camino, con posiblemente una de las mejores y más profundas experiencias de su vida.
Las personas por las que trabajamos, a la vez llenan nuestra vida de sentido. Porque cuando das recibes mucho más de lo que has dado.
